Aprendizaje y sueños que unen a las promesas de todas las islas

Una experiencia para siempre. La oportunidad de aprender y crecer junto a sus ídolos. Años de formación y propósitos para alcanzar sueños. El verano es el momento de continuar vinculado a su deporte favorito de una manera diferente, más lúdica y complementaria con otras actividades que propician una sonrisa.

El Campus Javi Beirán, capitaneado por el campeón del mundo con España y exjugador del Club Baloncesto Gran Canaria en dos etapas (2010-2014 y 2019-2021) y del Lenovo Tenerife (2014-2019), congregó este mes -del 3 al 23- a unos 700 niños y niñas en San Sebastián de La Gomera y en Adeje (Tenerife), donde los participantes de todas las islas tuvieron la fortuna de trabajar diariamente con el exterior madrileño y con los entrenadores y monitores que integran una cita que se consolida como referencia en el archipiélago.

«Este año hemos tenido un crecimiento alucinante, quizás por las ganas que tienen más niños de salir y de vivir estas experiencias. Han sido tres semanas en La Gomera y una en Adeje, siendo diferentes campus y este último es como más de baloncesto profesional por decirlo de alguna manera», expone un jugador con arraigo en Canarias tras 11 temporadas en la ACB repartidas entre ambos clubes.

«Hemos vivido una semana como un jugador profesional, con visitas de Rodrigo San Miguel -nuevo jugador del Burgos-, de Albert Oliver -leyenda del Granca y, a falta de oficialidad, se incorporará como técnico asistente del filial claretiano que compite en LEB Plata-, del entrenador Lolo Calín -Real Madrid-, de Iván Cruz -nuevo fichaje del Lenovo Tenerife-, de Laura Quevedo -internacional y exjugadora del Movistar Estudiantes- y de Cristo Cabrera -entrenador en la sección femenina del Alba Berlín alemán-, para convivir con experiencias de baloncesto», dice.

Beirán, de 35 años, brilla por su compromiso e implicación en acciones sociales y, cómo no, en todas las actividades en las que pueda transmitir sus conocimientos y vivencias a las promesas.

«En La Gomera es baloncesto, pero mucho también de entretenimiento y de caminatas al aire libre, con la fiesta del agua, la noche del miedo… Tuvimos casi 700 niños de todas las islas, con más de un centenar llegados desde diferentes clubes de Gran Canaria», afirma satisfecho con el aumento de jóvenes en un evento que también visitó la jugadora internacional grancanaria del Perfumerías Maite Cazorla.

La felicidad es máxima con la respuesta de los participantes y de las instituciones. Beirán recuerda que «comenzamos con este proyecto hace cinco años para fomentar el baloncesto un poco en La Gomera porque había desaparecido el CB La Gomera y veíamos que era una isla adecuada para hacer un campus y que creciera el baloncesto».

«Arrancamos deseando y soñando que vinieran de otras islas, pero sabiendo que era complicado en los inicios y ahora con lista de espera, peleándome todos los años para meter más gente porque me da pena que algún niño o niña no pueda venir. Pero bueno, intentando respetar los turnos porque no tenemos más capacidad en la residencia escolar. Intentaremos buscar nuevos formatos si sigue creciendo», dice.

Beirán reconoce que «estoy muy contento de esta experiencia porque, al final, es alucinante ver a todos los niños en La Gomera cómo quieren volver y prácticamente reservan su plaza a la semana siguiente».

Y es que el contacto diario con un jugador profesional otorga un plus para que los niños y niñas se decanten. «Intento transmitir los valores que creo que tiene el deporte y que sea un campus divertido. Que el baloncesto sea lo principal, pero que hay muchas otras cosas que hacer, como son interactuar, convivir, conocer gente de otras islas y clubs y estar yo en el día a día que creo que es lo que lo hace más especial», expone.

«Estoy con ellos y casi duermo con ellos. Estoy 24 horas aquí y se dan cuenta de que soy igual que ellos. Siempre les explico que yo iba a los campus igual y que pueden llegar a ser jugadores profesionales o no, pero todas estas experiencias y estos amigos durarán para siempre, y eso es lo más importante. El convivir así creo que es clave y se les ve esa sonrisa en las caras», agrega.

La apuesta por Bassas

Beirán se encuentra «sin contrato en el Estudiantes, donde ha habido muchos cambios y vamos a ver si sigo en el proyecto. También esperando otras ofertas de ACB o donde se pueda».

El campeón del mundo en China en 2019 conoce muy bien al nuevo director de juego del Granca Ferran Bassas, ya que compartieron vestuario en Tenerife.

«Creo que es un fichaje muy acertado, el Granca llevaba un par de años jugando con la posición de combo en el base y este año han apostado por dos bases claros desde el principio. Va a ser importante, es un poco diferente a Andrew, con menos físico, pero con mucha capacidad de anotación tras bote, con tiros de tres sobre todo, y puede nutrir al equipo y dirigirlo muy bien», indica.

«Es un jugador español que puede estar varios años y que puede crear una base junto a otros, que creo que es clave para que no haya cada año una limpieza de equipo o de imagen que despegue a la afición y pueda volver poco a poco a engancharse», cree.